Una preocupación constante en los padres es la alimentación de nuestros hijos, sobre todo cuando son muy pequeños. Siempre queremos darles lo mejor y a veces sufrimos y nos sentimos culpables cuando, por falta de tiempo para preparar nosotros su puré, les compramos un potito. ¿Son buenos los potitos? nos preguntamos. ¿Lo hacemos bien?
Una investigación reciente, llevada a cabo por el Dr. Dalmau, jefe de sección de la Unidad de Nutrición y Metabolopatías del Hospital Universitari i Politècnic La Fe, en colaboración con la Universidad de Murcia, ha analizado las posibles diferencias entre los purés caseros y los potitos industriales y han llegado a la conclusión de que su perfil nutricional es similar y que no exiten grandes diferencias entre ambos.
El contenido en proteínas y en grasas en los potitos y en los purés caseros es muy similar y en cuanto a la sal, en los potitos está "medida", mientras que en casa la añadimos "a ojo" y a veces nos pasamos.
Se habla de "perfil nutricional", pero y de los aditivos, conservantes y colorantes, que son tan perjudiciales para la salud...?
ResponderEliminarHola Syl. Los potitos se elaboran sin conservantes ni colorantes, ya que pasan por un proceso de esterilización y envasado al vacío que conserva el preparado de una forma absolutamente natural. Por otra parte, la normativa que regula la fabricación de alimentos infantiles es muy estricta, tanto en el control de ingredientes como en el etiquetado, lo que les otorga una garantía de alta calidad y también de seguridad.
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